TRES HORAS Y MEDIA duró todo el proceso de ir a Los Teques, validar, y regresar a Caracas. Llegué al Polideportivo La Boyera a las once, y era tan larga la cola, que una de las organizadoras me dijo que yo no iba a llegar para validar. Me recomendó que tomara uno de los buses para lograr hacerlo. Y seguí su consejo. Estaba dispuesta a ir a Higuerote, a Los Teques o donde fuera para validar mi firma. Fui anteayer y ayer y perdí el viaje, porque no aceptaban más personas, así que a la tercera era la vencida.Tomé uno de los buses que iba a Los Teques. Salimos a las 12:00 m. A la 1:00 p.m. estábamos en El Tambor. Formamos una larguísima cola, mucho más larga que la que encontré en La Boyera, pero tan rápida, que en menos de una hora ya habíamos pasado todos los que íbamos en el bus que nos llevó hasta allá. Y no sólo fluyó super rapida, pues casi corríamos, sino que los pasillos que nos conducían a las mesas de validación estaban cubiertas por toldos blancos.
Yo realicé el viaje, muy cómoda, en la cocina del autobús, al lado izquierdo de la ventana, junto a cinco compañeros más. Al momento de abordar el bus nos recibieron con la misma cortesía que un tour guiado. Ya llegando a Los Teques, David Smolansky abordó el bus, nos saludó e informó que ya el número de firmas para el Revocatorio por Miranda estaba listo, pero que las nuestras serían "el colchón" necesario, en caso de que el CNE, saliera con alguno de sus obstáculos en relación al número de validación de firmas.Y nos dio una buena noticia: Ya el Edo. Nueva Esparta había alcanzado el porcentaje necesario. Y no había peligro. Siguió una ovación y David Smolansky continuó viaje con nosotros rumbo a El Tambor. Una vez allí, el ambiente no podía ser más bonito y alegre: música, cantos y el "Si se puede" y el "Revocatorio" incluidos en ellos.
El regreso se realizó con alegría, fotos y mucha esperanza. El bus me dejó a las 3:30 p.m. frente a la bomba BP en Santa Fe y tanto mis compañeros como yo continuamos nuestro camino muy felices, no sin antes realizar una colecta para el amable chofer.